La partería, una profesión ancestral 

La partería ha sido una profesión que ha estado en la cultura mexicana desde tiempos prehispánicos y que ha dejado su legado en la salud pública al día de hoy

Fotografía/Vía: Boon Art

Lia Gómez

 

México.- La partería ha sido históricamente un trabajo de cuidados de las mujeres para las mujeres, principalmente por antiguas restricciones y tabúes alrededor del estudio y atención del cuerpo de las mujeres y su funcionamiento, sus vivencias y padecimientos como el parto, el cáncer de mama, la menstruación, el embarazo, entre otros.

 

Las grandes sanadoras, como también son conocidas, han pasado sus conocimientos de generación en generación acompañando en el bienestar de las mujeres incluso en situaciones que ponen en riesgo la vida de las madres y del recién nacido.

 

La partería en México tiene sus orígenes en la época prehispánica, en donde estas eran respetadas pues su labor estaba vinculada con una cuestión religiosa en torno a la fertilidad. Con la llegada de los españoles y la mezcla de culturas, la partería fue perdiendo presencia y conocimientos propios ya que desde la religión católica el parto era considerado como un estado sucio y de enfermedad además de que el uso de hierbas estaba relacionado a la brujería. Las pocas mujeres que conservaron estos saberes son aquellas que de alguna manera han sido marginadas desde el término de clase social: Mujeres indígenas, mestizas y afrodescendientes; yendo contra la idea de que el sufrimiento en el parto, sus padecimientos y complicaciones son algo natural y parte del mandato divino.

 

Aún con todos los estigmas que existen alrededor de la partería, esta sigue siendo necesaria y resistiendo con el pasar del tiempo puesto que aquellos conocimientos que vienen acompañados de hierbas que ayudan a sanar no pueden ser olvidados. Estos conocimientos han sido fundamentales en el papel de la salud pública, esencialmente en aquellos lugares donde la medicina moderna no ha podido llegar y donde se prefiere conservar las tradiciones, actualmente este oficio tiene mayor presencia en estados como Chiapas, Oaxaca y Guerrero.

 

La partería es una profesión que se realiza en todo el mundo y estas han ayudado a lo largo de la historia a las mujeres a dar a luz. Se puede definir a la partera como aquellas mujeres que acompañan en el parto proporcionando asistencia y ejecutan medidas de emergencia para las mujeres embarazadas. Además de esto, las parteras proporcionan asesoramiento y servicio para la planificación familiar, salud reproductiva e incluso detectar cáncer cervical y de mama.

 

La ONU declaró al 5 de mayo como el Día Internacional de las Parteras con la intención de brindar un homenaje y reconocer la labor de las mujeres. Es desde el 2008 que el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) trabaja con gobiernos y asociados para la formulación de políticas en torno a este tema con la finalidad de reconocer la importancia de este oficio y capacitar para que las parteras tengan una amplia formación en los temas que manejan además de que cuenten con los medios necesarios para poder ejercer. 

 

En México, se realizó en el Senado el Primer Foro por el Derecho a la Partería en México el 14 de marzo del 2017, por iniciativa del Colectivo Tequio Materno y la senadora Martha Tagle. En dicho foro se trataron temas relacionados con el ejercicio de la profesión de la profesión y la transformación de las maternidades. Parte importante de lo que se vivió en este foro tiene que ver con la necesidad de la incorporación de la partería como una de las opciones para la atención del embarazo, el parto y el puerperio dentro del servicio de Salud Pública en México.  

 

El ver a la maternidad y las diferentes vivencias que le acompañan como un tema de salud pública, además la implementación de un servicio de partería digno en México influiría en la disminución de cesáreas innecesarias, malos tratos durante el parto y muertes maternas cuyas consecuencias serían la mejora de la salud materna, la disminución de la medicación y el fomento de la crianza amorosa.

Fuentes CNDH, EcoSur, Gob.Mx